Despedida a los voluntarios alemanes en Montevideo
IBV
Un año más, con inmensa alegría hemos compartido el trabajo de voluntarios en nuestro centro. Agradecemos a Nora su calidez, compromiso y responsabilidad en el desarrollo de las tareas. Estamos seguros que la experiencia compartida fue muy enriquecedora para ambas partes.
Así reflejaba el equipo del Instituto de Buena Voluntad el paso de Nora y así nos contaba ella en noviembre sobre su experiencia y tareas en el instituto: Entrevista con los voluntarios alemanes en Montevideo
Casa de la Amistad
El Caif Casa de la Amistad despide hoy a Anna Müller, voluntaria metodista que vino desde Alemania a estar un año entre nosotros. Le agradecemos su esfuerzo por comunicarse con los grandes y con los niños, su forma de ser tan cariñosa, dedicada y humilde. Una gran compañera, comprometida con el Centro Caif, su trabajo y los chiquilines.
¡Te vamos a extrañar Anna!. Que Dios te bendiga y proteja en los caminos que la vida te ponga por delante.
Hogar Amanecer
Como cada año llega el momento en que nuestros voluntarios deben regresar a sus hogares, a su país, su familia y por supuesto a sus futuros estudios. Este año nos acompañaron Joschua Kemper, Corinne Martínez y Jana Ruckgaber.
Y este momento a pesar de la alegría del tiempo compartido, nos llena de tristeza y nostalgia.
Para quienes no conocen el trabajo de los voluntarios les contamos: ellos generalmente acompañan la tarea de los educadores, comiendo con ellos, organizando tareas, manualidades. También llevan a los diferentes niños a sus citas con tratamientos de fonoaudiología, psicomotricista, y los buscan a la escuela que queda muy próxima al hogar.
El trabajo de los voluntarios se desarrolla en distintas áreas, deportivo/recreativo, con la organización de juegos en el jardín, en la cancha o dentro de la casa, por supuesto realizan también un trabajo educativo.
En este año en particular los tres voluntarios se incorporaron rápidamente a la dinámica del hogar, realizando sus tareas con mucha alegría y eficiencia.
Al comienzo del período realizamos con ellos reuniones para dar las orientaciones correspondientes para el trabajo, comienzan después de un período de adaptación. Cada semana recabamos sus dudas, sus inquietudes para darles el mejor apoyo. Al final nos reunimos para evaluar la tarea cumplida.
Hay que destacar la importancia que tiene el conocimiento de la Institución desde el Programa de Voluntariado, para así lograr la elección de jóvenes que se acerquen al perfil que se describe año a año para las tareas.
Al culminar el período ellos se van con muchos aprendizajes y nos dejan a nosotros otros tantos, porque cada uno de nosotros les damos un pedacito de nuestro corazón y ellos del suyo. Destacamos este año la capacidad de adaptación, la comprensión del idioma, la empatía con los niños y los adultos que trabajamos día a día.
Sobre todas las cosas encontramos en cada acción un acto de amor. Muchas gracias a Dios por sus vidas y a nuestro Dios le pedimos que los bendiga ricamente a ellos y sus familias.
Silvia Peri – directora
Categorías: Noticias