Día de los abuelos virtual

La Federación Femenina organizó como todos los años el Día del Abuelo. Este año a causa de la pandemia de Corona virus el reencuentro no pudo ser presencial. Por lo que por las redes se formó un intercambio de historias sobre recuerdos de abuelos y lo que significa transitar esa hermosa etapa de la vida.

Ibis de 100 años con sus nietas. Día de los abuelos en templo San Pablo

«Qué lindo recordar a los abuelos.  A mi abuela materna no la conocí. Pero si conocí a mi abuelo materno. Tenía una presencia importante. Su caminar y educación eran de un hombre que respetaba a la mujer y amaba a mi mamá y a nosotras sus nietas.  Él trabajó en el Palacio Legislativo, lo querían mucho. Y nos llevó a conocer la cámara de senadores. Pero cuando nos visitaba en casa nos hacía reír. Escondía su cara y luego nos miraba con una careta de goma, tenía varias, hoy muy común. Y hacía juegos con cartas. Era divertido.»

«Mis abuelos paternos vinieron de España. Mi abuela hacía un chocolate riquísimo. Pero no soportaba a las gitanas por eso las corría por la vereda. Sin embargo, mi abuelo era un gran pescador en España, tuvo barcos pesqueros. Aquí concurría a la escollera y traía unas corvinas enormes. También otros pequeños pescaditos que cocinaba el mismo. Pero tenía otra actividad que le gustaba. La jardinería era algo que hacía plantando y cuidando con mucho amor. Dalias de diferentes colores y tamaños y otras tantas flores. Muy callado y cariñoso.»

«Dios los tenga a su lado, todos ellos nos dieron el título de nietos, más o menos a todos nos acunaron, nos prepararon el biberón, más de una prenda nos plancharon, nos invitaron a dar nuestros primeros pasos, a hablar, tomaron nuestra mano para ir a la Escuela, pero sobre todo sus anécdotas, su ejemplo en lo que se defendían como tarea jamás será olvidado…  por esos cuentos inventados que también a ellos los hacia dormir, pero ese amor nacido de muy adentro de las entrañas, que nos invadió, que lo sentimos…  y que ahora en parte queremos ser como ellos. Los Abuelos como amor incondicional, a toda hora, todo terreno. ¡DIOS ES AMOR!!! Feliz Día para el recuerdo de muchos y por aquellos que están junto a vos, o sos tú. Amén.» Estela Casco

Ruth Caffarel y Enrique Pippolo con sus nietos

«Buenos días queridas hermanas y feliz día para todas. Nosotros hoy damos gracias a Dios por esta etapa maravillosa que nos permite vivir como abuelos de nuestros 6 adorados nietos. Experiencias realmente tenemos muchísimas a cual más hermosas. Pero decidimos mandar una foto de la última semana antes de la pandemia famosa, cuando como todos los años separamos una semana para disfrutarnos solos abuelos y nietos. Desde muy chiquitos lo hacemos y ahora… aunque son tremendos muchachos, hacen esfuerzos muy grandes para intercalar exámenes o licencias los que ya trabajan para no perderse esto que es sumamente importante para todos. Donde ya no son los chiquillos que hay que saber que hacen o donde están, sino que son largas charlas hasta muy entrada la noche, aprendiendo y compartiendo hermoso temas para luego escuchar que se preocupan ELLOS en cuidarnos. Abus ya está muy fresco… abuelo cuidado no vayas por ahí… abuela dame la mano que está muy oscuro por ahí…  ¿Algo más que dar gracias a Díos por todo? Abrazo grande y Feliz día de los abuelos para todos» Ruth y Enrique Pippolo

«Buenos días gente linda. Felicidades a los abuelos del Grupo. Un día muy especial. Recuerdo a mi abuela diariamente. La que nos crió, mimó, acunó. Siento ese olorcito a hogar donde fuimos tan felices. Cuando se fue… nada fue igual. Dejan huellas profundas. Que afortunados son los abuelos y los nietos… el amor más grande, más puro.»

«Los Abuelos, no crían a sus nietos, los abuelan. ¿Qué significa abuelar? Mirar desde el corazón a los hijos de sus hijos, poner a su disposición historias de infancia que construyen identidad. Cantar con ternura. Escuchar con atención. Ofrecer consuelo, jugar con picardía, siendo cómplice y guía a la vez. Y por sobre todo, amar incondicionalmente. Feliz día para todos/ a los Abuelos de alma beso enorme. Gracias Señor por darme ese privilegio»

«Yo soy la única hija mujer. Mis hermanos son tres y entre ellos se llevan 2 años de diferencia, yo llegué 5 años después del menor.

Siempre fui, La Nena. Esa nena fue creciendo y si abuelita le preocupaba verme sin novio le decía a mi mamá. ¿Y la nena no piensa casarse? Así que cuando yo festejaba mi cumpleaños, ella me preguntaba. ¿Cuántos años cumplís? Entonces yo le decía y ella me contestaba.

¡Hay nena, es la mejor edad para el amor! Y cada año volvía a preguntar lo mismo y me decía lo mismo. Fueron muchos años. Hasta que tuvo la oportunidad de visitarnos, siendo ya muy viejita, dos semanas antes de la fecha del casamiento con Mortimer el 11 de enero de 1986 (tuvo que esperar 39 años, y sí, les confirmo que es la mejor edad para el amor :)»

«Un día el niño dice a sus papás:
_Ya sé lo que quiero ser cuando sea grande… ¡Quiero ser ABUELO!
_¿Y por qué? Preguntan los padres…

Contesta el niño: Porque los abuelos siempre que voy están en casa, tienen tiempo para ver televisión y para jugar, tienen plata para comprar dulces y helados y hacen dulces, tienen auto para pasear, oyen música, duermen después de jugar, saben muchas cosas, dan muchos besos y tienen mucho amor. Por eso, quiero ser ABUELO…

Definitivo, la mejor profesión es ser ABUELOS… Felicidades a todos los abuelos que lean esto… ¡¡¡Tener nietos es toda una bendición del cielo!!!

Si conoces a un abuelo, mandale este mensaje, si es un buen abuelo lo confortará y si no lo es le hará reflexionar»

«Yo conocí a mi bisabuela Filomena y al matrimonio Octaviano y Severa, también bisabuelos míos. Cuando visitábamos a los bisabuelos, siempre estaban en su cama, jugando a las cartas. Él muy sonriente. Ella, seria y callada, haciendo honor a su nombre: Severa. ¡¡¡Habían tenido 18 hijos!!! y una de sus hijas, también tuvo 18 hijos… Menos mal que a mis padres no se les ocurrió seguir esa tradición familiar!!!»

«Ambos abuelos en relación con la Península Ibérica. Mi abuelo paterno descendiente de Azorianos y mi abuelo materno inmigrante de Cantabria. Mis abuelas ya de América Latina. Especialmente mi abuela materna que era mulata. Ambas muy laboriosas y cariñosas, con las que aprendí a tejer, crochet. Entre consuegras su relación era muy cordial, amigable y un cierto respecto que hasta hoy recuerdo.»

«Le doy gracias a Dios por haber concedido a mi vida el gran privilegio de ser abuela, algo tan importante, qué me llena de gozo y alegría en el corazón. Soy abuela de 32 nietos, tengo dos en la gloria ahora, Eduardito, Jason Ángeles de Luz. Dios prometió dar hijos como arena en el mar a mí me bendijo con nietos y con casi 10 bisnietos que dos de ellos vienen en camino. ¡A Dios sea toda gloria y alabanza! Es un día para mí de lluvias de bendiciones.

Les deseo de corazón lo mejor en este día. Nietos son hijos del corazón sin haberlos concedidos en nuestro vientre, pero somos cómplices, amigos y mucho más de ellos. Para mi vida son columna dentro de todos los desiertos pasados son mi fuente de vida. Todo lo puedo en cristo qué me fortalece.»

«Ayer , un día especial, pudimos sacar de nuestro «Baúl de los Recuerdos», muchas alegrías y recuerdos de nuestros queridos abuelitos y abuelitas. ¡Gracias a Dios por ellos!»

Alicia Minuto junto a Norberto y nietos

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